Aprender a cultivar la tierra, de manera amigable con el ambiente, es el propósito de la Policía Nacional con el proyecto Huerto Ecológico que desarrolla en el Instituto Superior Policial (ISPOL).

La introducción de esta actividad extracurricular  le da darle un valor agregado a la formación policial y educativa de los aspirantes a agentes de policía.

El tiempo ya indicaba era momento de cosechar el maíz, todos con canastas y motetes, recogían aquellas mazorcas que luego serían disfrutadas por todos, en los platos tradicionales de nuestro país como las torrejitas y bollos.

En este Huerto Ecológico, se cultivan tres variedades de maíz: Guararé, Calilla Rojo y Pioneer (Pionero).

Se trata de un proyecto sostenible, con el que los jóvenes que se preparan para ser futuros agentes de policía, siembran y cosechan sus propios alimentos, enseñándoles el amor por la tierra, el respeto y cuidados que esta merece por las bondades que nos ofrece, creándose esa conexión con la naturaleza.

El teniente Rafael Saturno, supervisor del huerto indicó que actualmente se cultivan diversos productos, como zapallo, maíz, café, cacao, ñame, plátano, yuca, frijoles, ajíes, tomates, zanahorias, pepinos, variadas frutas, entre otros. Utilizándose abonos orgánicos.

La meta según comentó, es acrecentar este huerto y hacerlo lo más sostenible posible, aprovechando que es una tierra fértil.

Todos los jóvenes en el ISPOL participan. Algunos de ellos cuentan con conocimientos básicos adquiridos en sus familias y hoy los comparten con el resto.

Al final, no solo nos trae satisfacción ver los frutos del trabajo realizado, sino que también estos conocimientos puedan ser llevados a la comunidad, puntualizó Saturno.