La Policía Nacional a través de la Unidad Preventiva Comunitaria lleva a cabo en los corregimientos de Curundú y El Chorrillo el Programa de Formación y Educación Continua destinado a jóvenes y adultos desertores escolares en riesgo social en un esfuerzo por abordar uno de los desafíos educativos más apremiantes de la sociedad.

Este programa en el que las unidades policiales imparten las clases busca brindar una segunda oportunidad educativa a aquellos adolescentes, jóvenes y adultos que han abandonado prematuramente sus estudios debido a diversas circunstancias sociales y personales. Actualmente contamos con 20 personas.

El mayor Royván Rudas, Jefe de la Unidad Preventiva Comunitaria, dijo que el objetivo fundamental es proporcionar un entorno seguro y de apoyo donde estos jóvenes puedan retomar sus estudios y adquirir las habilidades necesarias para integrarse positivamente en la sociedad y el mercado laboral.

En tanto, Luisa Echevers de Brown, Directora de la Fundación Panalfalit, indico que las unidades capacitadas, brindan orientación personalizada y apoyo emocional a cada participante, fortaleciendo así su resiliencia y motivación para continuar aprendiendo.

Por su parte, Luis Calderón de 29 años residente en El Chorrillo lleva dos meses formando parte de este programa y está muy motivado a culminar sus estudios para así lograr brindarle una mejor calidad de vida a su familia.

Con esta iniciativa, la Policía Nacional de la mano con la comunidad sigue dando pasos concretos hacia la reducción de las tasas de deserción escolar.